NUESTRA HISTORIA
Bienvenidos a un breve resumen de nuestra historia, soy Eliana Lugo, periodista y especialista en Derechos Humanos y DIH (Derecho Internacional Humanitario) de profesión, casada y mamá de Elena y Agustín, quienes son mi máxima inspiración en toda esta aventura de la educación, somos Hispanos formados en la educación tradicional, quizás con la mejor intención, pero no con el resultado esperado.
Cuando me hice mama, quise cambiar el concepto de educación en mi hija y no dar continuidad a patrones generacionales que interrumpirían sus procesos de aprendizaje, ante esto quise explorar, leer y conocer diversas pedagogías establecidas en el mundo.
Después de todo este proceso finalmente nos inclinamos por Montessori, empezamos de forma empírica, luego nos fuimos acercando poco a poco a toda la filosofía y el paso a paso que requiere ser una familia Montessori. Ante la gran necesidad de aprender y conocer el método, me forme como CO- GUIA MONTESSORI, experiencia maravillosa, que me permitió sanar mi niño interior y poder realizar mi proceso de escuela en casa aplicando las mejores herramientas.
Hicimos 3 años y medio de escuela en casa, con un resultado maravilloso, luego tuve la fortuna de trabajar como maestra y conocer el esfuerzo que hace cada una por brindar aprendizaje a los niños y niñas que asisten a sus aulas de clase, luego de diez meses tomamos la decisión de volver a casa y dar continuidad a nuestro home school, pero en esta oportunidad acompañadas de más niños a nuestro hoy denominado proyecto de vida “Montessori Club”.
En una abrir y cerrar de ojos la vida me cambio, un día era una niña feliz corriendo por las calles de mi pueblo junto con mis amigos, al mirar hacia un lado ya me hice profesional, luego de trabajar haciendo lo que más anhelaba me hice mama y así mismo en un parpadear estaba siendo maestra y mama de mi hija para brindarle lo mejor.
Y ahora estoy aquí agradecida con quienes han visto mi trabajo y confiado en cada idea que he querido materializar, a mis 33 años de vida, puedo decirles que he logrado cumplir cada una de mis metas, que cada paso que hemos dado ha sido maravilloso y todo nos ha llevado a cumplir nuestros propósitos en la educación de nuestra hija y futuras generaciones.